Figuras insólitas 

Algunas palabras de Ortega y Gasset en La Deshumanización del Arte nos parecen pertinentes al respecto de la obra de García Gutiérrez, pues denuncian cómo a menudo creemos "…que es cosa fácil huir de la realidad, cuando es lo más difícil del mundo. Es fácil decir o pintar una cosa que carezca por completo de sentido, que sea ininteligible o nula: bastará con enfilar palabras sin nexo o trazar rayas al azar. Pero lograr construir algo que no sea copia de lo ‘natural’ y que, sin embargo, posea alguna sustantividad, implica el don más sublime."

En la obra de García Gutiérrez destacan también algunas de las características que Ortega otorga al ‘arte nuevo’ como son la tendencia a una "esencial ironía", o la tendencia a "eludir toda falsedad y, por tanto, a una escrupulosa realización"; y, quizá transluce el rasgo definitorio: que el artista considere el arte como "cosa sin transcendencia alguna". 

Si, como dice Ortega, "tal vez en la más abstracta línea ornamental vibra larvada una tenaz reminiscencia de ciertas formas naturales", García Gutiérrez, en su "fuga de lo humano" llega, ciertamente, en el término ad quem a una "fauna heteróclita" en la que la forma orgánica o natural se entremezcla con la mecánica o artificial, como sucede en distintos ámbitos de la sociedad actual (tal vez hoy con más fuerza que nunca y, en el futuro, quizá, aún en mayor medida). Pero en estos trabajos no se da sólo el encuentro de lo orgánico con lo mecánico, también de lo fantástico con lo experimentado o, incluso, de la técnica del dibujo clásico con el espíritu del arte urbano del Grafitti.

A aquéllos ya habituados al arte abstacto y al avant-garde conceptual y post-moderno, la originalidad de la presente obra puede devolverles, con suerte, al estado descrito y deseado por Ortega cuando dice: "Con las cosas representadas en el cuadro nuevo es imposible la convivencia: al extirparles su aspecto de realidad vivida, el pintor ha cortado el puente y quemado las naves que podían transportarnos a nuestro mundo habitual. Nos deja encerrados en un universo abstruso, nos fuerza a tratar con objetos con los que no cabe tratar humanamente. Tenemos, pues, que improvisar otra forma de trato por completo distinto del usual de vivir las cosas; hemos de crear e inventar actos inéditos que sean adecuados a aquellas figuras insólitas."